Algunos puntos relevantes de la entrevista al juez Juan María Ramos Padilla.
– Macri cooptó la Corte para transformarla en un Poder Judicial mafioso dirigido por cuatro delincuentes que responden a los mandatos de Magnetto, las corporaciones económicas y la Embajada de Estados Unidos.
– Se habla de candidaturas pero si no sacamos a esos delincuentes va a ser muy difícil salir adelante con nuestro país.
– El dilema es entre obedecer los fallos de la Corte o oponerse, pero el Gobierno ha dejado que esto crezca.
– La Corte daña a la democracia. Esto es un golpe de Estado, asumen competencias que no le son propias y hasta dicen a quién podemos votar, cuando se vota, cómo se vota y quién puede ser candidato.
-Se suman el deterioro institucional, la inseguridad y la economía (por el FMI) para poner a la Argentina en un momento muy crítico.
– El artículo 21 de la Constitución dice que debemos alzarnos en defensa de la Patria y de la Constitución, el artículo 36 habla de la supremacía de la Constitución Nacional, no de las órdenes ilegales de los jueces. Ahí está el dilema, decir que no vamos a cumplir uno de sus fallos genera un precedente muy peligroso para el futuro, y se agarran de eso. Por la reforma del 94, con el tercer senador para la oposición, se hace imposible alcanzar los dos tercios para destituirlos.
– El Gobierno tenía herramientas para plantarse frente a la Corte, no las usó y lo hemos permitido. La oposición responde a sus mandantes, las grandes empresas.
– Hay que tener jueces que tengan un vínculo fuerte con su pueblo: “Un juez debería cortarse las manos antes que votar en contra de su pueblo.”
-Estamos convalidando órdenes ilegales: se deberían haber realizado las elecciones provinciales y no se debería haber enviado representantes al Consejo de la Magistratura. Los fallos de la Corte hay que cumplirlos, pero estos son evidentes prevaricatos.
– Respecto a la proscripción: el indulto es una herramienta válida, aceptada por todas las Cortes.
– Macri cooptó la Corte para transformarla en un Poder Judicial mafioso dirigido por cuatro delincuentes que responden a los mandatos de Magnetto, las corporaciones económicas y la Embajada de Estados Unidos.
– Se habla de candidaturas pero si no sacamos a esos delincuentes va a ser muy difícil salir adelante con nuestro país.
– El dilema es entre obedecer los fallos de la Corte o oponerse, pero el Gobierno ha dejado que esto crezca.
– La Corte daña a la democracia. Esto es un golpe de Estado, asumen competencias que no le son propias y hasta dicen a quién podemos votar, cuando se vota, cómo se vota y quién puede ser candidato.
-Se suman el deterioro institucional, la inseguridad y la economía (por el FMI) para poner a la Argentina en un momento muy crítico.
– El artículo 21 de la Constitución dice que debemos alzarnos en defensa de la Patria y de la Constitución, el artículo 36 habla de la supremacía de la Constitución Nacional, no de las órdenes ilegales de los jueces. Ahí está el dilema, decir que no vamos a cumplir uno de sus fallos genera un precedente muy peligroso para el futuro, y se agarran de eso. Por la reforma del 94, con el tercer senador para la oposición, se hace imposible alcanzar los dos tercios para destituirlos.
– El Gobierno tenía herramientas para plantarse frente a la Corte, no las usó y lo hemos permitido. La oposición responde a sus mandantes, las grandes empresas.
– Hay que tener jueces que tengan un vínculo fuerte con su pueblo: “Un juez debería cortarse las manos antes que votar en contra de su pueblo.”
-Estamos convalidando órdenes ilegales: se deberían haber realizado las elecciones provinciales y no se debería haber enviado representantes al Consejo de la Magistratura. Los fallos de la Corte hay que cumplirlos, pero estos son evidentes prevaricatos.
– Respecto a la proscripción: el indulto es una herramienta válida, aceptada por todas las Cortes.