Hablamos con Paula Español, economista y ex subsecretaria de Comercio Exterior en los años 2014/2015, por el acuerdo Unión Europea-Mercosur. Si bien no se conocen en profundidad los términos del acuerdo, le preguntamos cuáles son las implicancias y consecuencias económicas para nuestro país.
“No es estar a favor o en contra de un acuerdo, es cierto que no se conoce la letra chica, pero yo estuve en esas negociaciones y tengo conocimiento de cuáles eran las concesiones que nos pedía la Unión Europea para llevar adelante este acuerdo. Entre lo que han dado a conocer de manera oficial, lo que publica la Unión Europea y algunas cuestiones extraoficiales, imagino hacia dónde va el acuerdo. El acuerdo tiene una parte comercial que libera el comercio industrial de toda la Argentina y Mercosur en un cierto período de años, se va a liberalizar el mercado en un futuro con una potencia mundial, eso es un capítulo, tiene diferentes impactos. Pero además tiene muchos otros capítulos, un capítulo de normas públicas, capítulo de normas sanitarias y fitosanitarias, tiene indicaciones geográficas vinculado a las patentes, todas estas áreas que se negocian afectan a una gran cantidad de sectores, no tiene que ver con una cuestión comercial solamente sino con una cuestión de mercados, de poder acceder nosotros a los mercados de ellos, nosotros abrimos nuestros mercados y ellos abren con cuotas la producción de bienes primarios, entonces nosotros tenemos un sinfín de medidas para recibir los bienes industriales europeos y para perder mercado de nuestro bienes industriales en Brasil, para poder ganar algunas cuotas en la producción primaria”.
Sobre los puntos del acuerdo, Español explicó que “Todavía esto es un entendimiento, se tienen que revisar legalmente el acuerdo y luego se firma efectivamente, una vez que se firme irá por el parlamento europeo y después de los países del Mercosur, eso lleva un tiempo. Cuando se concreta de consolida y no se puede andar modificando, no es una legislación que se pueda modificar fácilmente. Este acuerdo afectaría fuertemente todo el tejido industrial nacional, del mercado doméstico y el que exporta, ¿qué tipo de reconversión se le puede pedir a una economía como viene y que además va a tener que ser competitiva? Es muy difícil llegar a imaginar tener una industria competitiva sin tener una economía activa“.
“Queremos hacer acuerdos comerciales siempre y cuando sean beneficioso para Argentina y la región. Las regiones más desfavorecidas, tienen que recibir un trato diferente a las más favorecidas. El gobierno quiere tener este anuncio político en un contexto electoral en el que no hay ninguna noticia económica favorable. Sin dudas había problemas, pero la inflación es más alta, la deuda es más grande, el déficit primario aumentó, hay más desempleo, más pobreza, no hay muchas cuestiones económicas para mostrar. Queríamos una apertura inteligente y una relación equitativa con las potencias. Ponen en debate a los detractores, pero conocemos la letra chica, conocemos a los negociadores europeos, estuvimos hasta diciembre de 2015. La información oficial demuestra que han ido avanzando haciendo más concesiones de nuestro lado”.