Síntesis de la entrevista con Eduardo Vior.
El BRICS no es un órgano de cooperación económica, ni un bloque regional ni un pacto militar, sino que une países con diversos sistemas para configurar un nuevo orden internacional. Una diplomacia “win – win”, que China quiere que tome los principios de coexistencia pacífica enunciados por el Movimiento de Países No Alineados en 1955.
Con los nuevos miembros casi todo el potencial hidrocarburífero del mundo queda incluido dentro del BRICS+, lo que significa sacarle la alfombra de abajo de los pies al dólar. Una de las fortalezas que les quedan a los norteamericanos es la acumulación de información que tienen los llamados Cinco Ojos, la asociación de los servicios de inteligencia de EEUU, Gran Bretaña, Canadá, Australia y Nueva Zelanda.
Hay diferencias políticas dentro de la organización.
India tiene buenos vínculos con Rusia y los EEUU y no quiere una moneda única que irrite a los norteamericanos. Lo que se puede hacer es que el comercio intrabloque se haga con monedas nacionales. Para evitar conflictos en cuanto al valor de cada divisa Argentina y Brasil decidieron usar el Yuan.
Por conflictos internos Sudáfrica no quería ampliar el Brics ya que, a diferencia de su presidente, el vice es pronorteamericano. Xi Jinping tuvo que adelantar su viaje para convencerlo.
Con la entrada al Brics+ Argentina puede acceder a los créditos del Nuevo Banco de Desarrollo, consolidar el vínculo con Brasil, entrar más fácilmente a los mercados africanos y asiáticos, y sentarse a la mesa cuando se tomen decisiones político económicas y de seguridad relevantes para todo el mundo. El FMI no cerraba el envío de los 7.500 millones de dólares a nuestro país, terminó de decidirlo cuando se enteró del ingreso de Argentina al bloque.
Vior explicó las razones geopolíticas del ingreso de Etiopía al BRICS+, las razones por las que Lula dio el impulso decisivo para el ingreso argentino al bloque y el apoyo de China a esta inclusión.
El BRICS no es un órgano de cooperación económica, ni un bloque regional ni un pacto militar, sino que une países con diversos sistemas para configurar un nuevo orden internacional. Una diplomacia “win – win”, que China quiere que tome los principios de coexistencia pacífica enunciados por el Movimiento de Países No Alineados en 1955.
Con los nuevos miembros casi todo el potencial hidrocarburífero del mundo queda incluido dentro del BRICS+, lo que significa sacarle la alfombra de abajo de los pies al dólar. Una de las fortalezas que les quedan a los norteamericanos es la acumulación de información que tienen los llamados Cinco Ojos, la asociación de los servicios de inteligencia de EEUU, Gran Bretaña, Canadá, Australia y Nueva Zelanda.
Hay diferencias políticas dentro de la organización.
India tiene buenos vínculos con Rusia y los EEUU y no quiere una moneda única que irrite a los norteamericanos. Lo que se puede hacer es que el comercio intrabloque se haga con monedas nacionales. Para evitar conflictos en cuanto al valor de cada divisa Argentina y Brasil decidieron usar el Yuan.
Por conflictos internos Sudáfrica no quería ampliar el Brics ya que, a diferencia de su presidente, el vice es pronorteamericano. Xi Jinping tuvo que adelantar su viaje para convencerlo.
Con la entrada al Brics+ Argentina puede acceder a los créditos del Nuevo Banco de Desarrollo, consolidar el vínculo con Brasil, entrar más fácilmente a los mercados africanos y asiáticos, y sentarse a la mesa cuando se tomen decisiones político económicas y de seguridad relevantes para todo el mundo. El FMI no cerraba el envío de los 7.500 millones de dólares a nuestro país, terminó de decidirlo cuando se enteró del ingreso de Argentina al bloque.
Vior explicó las razones geopolíticas del ingreso de Etiopía al BRICS+, las razones por las que Lula dio el impulso decisivo para el ingreso argentino al bloque y el apoyo de China a esta inclusión.