Marcelo Justo, Periodista especializado en justicia impositiva y paraísos fiscales, sobre el proyecto del macrismo en Capital Federal para convertir la ciudad en un paraíso fiscal.
“El funcionamiento de los Paraísos Fiscales es beneficioso para una pequeña élite de contadores, abogados, por ejemplo las Islas Caimán, o Delaware o city of London, ahí hay un grupo de profesionales que se favorece mucho y se han convertido en una mecánica central del mundo. Los habitantes de Capital Federal no vivirían mejor, si esa es la intención que hay detrás.
La población más perjudicada es la persona común y corriente. La élite es beneficiada, un Paraíso Fiscal no le cobra ningún impuesto a las multinacionales y sí le cobra impuestos a su propia población. Uno de los rasgos salientes de cualquier Paraíso Fiscal es la opacidad total, la impenetrabilidad: es muy difícil saber lo que pasa, quién tiene cuenta, quién es el beneficiario de esa compañía, está como acorazada. Si no tuvieran esa opacidad no tendrían razón de ser. Es un rasgo totalmente central”.
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