Hablamos con Paolo Zaniratto, abogado penalista, sobre la denuncia a un pastor de los Testigos de Jehová por supuesto abuso sexual.
“En principio podríamos hablar de una tentativa de abuso sexual en este caso particular, con esta denuncia que estoy patrocinando, no obstante hemos tomado conocimiento de casos de acoso sexual, incluso muchos eran menores al momento del hecho. La denuncia está radicada en la UFI 8 de Quilmes, es importante que las personas afectadas se acerquen y denuncien, porque estamos ante muchos abusos y acosos. Siendo respetuosos de todas las creencias, me parece que en estos lugares con algunas características sectarias, muchas veces favorecen algunos actos de impunidad, donde incluso se pugna por tapar esta clase de delitos y algunas interpretaciones de esas doctrinas religiosas hacen que los casos no se difundan, que las víctimas no vayan a la justicia y denuncien los casos. Ante el caso las reacciones no fueron homogéneas, hay muchas otras víctimas, todas mujeres muy jóvenes, algunas han denunciado, otras siguen con miedo, ella ha recibido amenazas, muchas presiones para que no siga adelante con la denuncia y tratando de que esto no trascienda. Es un doble juego de presión psicológica: le hacen creer a la víctima que en caso de que vaya a la justicia está fallando a la fe”.