Nora Bär, periodista científica, editora de Ciencia y Salud del diario La Nación e integra la Academia Nacional de Periodismo en diálogo con Mestiza Radio se refirió a la idea de infodemia y sus características.
Nora Bär es una de las periodistas científicas más destacadas de la Argentina. Es la editora de Ciencia y Salud del diario La Nación. Integra la Academia Nacional de Periodismo, fue reconocida por su labor con numerosos premios, entre ellos el Konex de Platino, y en esta semana se dio un hecho inusual, ya que la asamblea de trabajadores del diario La Nación le hizo un reconocimiento público por su labor periodística, una distinción que no tiene precedentes.
En diálogo con Mestiza Radio se refirió a la idea de infodemia y sus características. Dijo que es un término de acuñación reciente, que no tiene un significado preciso, pero que se puede definir como “el tsunami informativo que acompaña a la pandemia”.
La periodista observó que, aunque esta no es la primera pandemia que afronta la humanidad, hay un fenómeno novedoso, que es que se sigue segundo a segundo a través de los medios de comunicación y las redes sociales. Consideró que este fenómeno tiene un aspecto positivo, la difusión de informaciones valiosas, pero también uno negativo, la difusión de noticias inventadas, fake news, publicaciones esotéricas, o medias verdades. Por otra parte, las informaciones exceden las secciones de ciencia y, a frecuentemente se encuentran en los medios personas que opinan sobre cuestiones científicas sin tener la formación específica necesaria para hacerlo.
La periodista científica también se refirió a las publicaciones que hablan de fármacos o vacunas que prometen solucionar el problema del Coronavirus a corto plazo. Recordó que hay 70 desarrollos de vacuna en marcha pero todas están en etapas preliminares, pero que la Organización Mundial de la Salud dijo que llevará de 12 a 18 meses disponer de un producto viable, ya que se requiere desarrollarla, probarla y producirla a nivel masivo.
En cuanto a las drogas, hay más de 400 ensayos, la mayoría con fármacos que se utilizaban para otras enfermedades y que tienen efectos adversos. Advierte contra cualquier apresuramiento pues en muchos casos, esas drogas se han probado en muy pocos pacientes y pueden tener consecuencias muy negativas.
Bär expresó que muchos de esos anuncios responden a intereses políticos, económicos y a operaciones de marketing para ganar visibilidad para el futuro. También que en algunos medios se difunden noticias que no son probadas ni correctas. Destacó la necesidad de que los periodistas científicos siempre tengan una dosis de escepticismo y que corroboren la información de manera rigurosa.
Por último destacó que no sólo los médicos, sino gran parte del sistema científico argentino, dejó de lado sus trabajos académicos para aportar sus conocimientos en el control la pandemia. Cientos de científicos, matemáticos, biólogos, inmunólogos, virólogos, que trabajan ad honorem y ponen sus saberes al servicio del país. Expresó su esperanza de que esta situación trágica tenga un aspecto la revalorización de la ciencia y el desarrollo de políticas públicas que hagan posible del aprovechamiento más efectivo de esas capacidades.