Darío Becchetti, Columnista de Análisis Político-Comunicacional, sobre la demanda contra Amazon por prácticas monopólicas.
“En la misma semana que anunció la compra de Metro Goldwin Meyer, Amazon fue demandado por prácticas monopólicas por parte del fiscal general de Washington DC. El fiscal plantea que Amazon controla precios en todo el mercado online de venta de productos al consumidor final y de este modo mantiene su poder de monopolio. Esto va en contra de las más elementales leyes de Defensa de la Competencia y por eso inicia la demanda. La demanda describe la manera en que Amazon abusa de su posición dominante, prohibiéndoles a los que venden en su sitio vender más barato en otras plataformas incluyendo plataformas propias. Esto hace que se mantenga un piso de precios artificialmente altos en el mercado.
Entre comisiones, la chance de destacar más tu producto y otras posibilidades, Amazon se lleva casi el 50% del precio del producto solo por ser el intermediario entre vendedor y comprador. Si Amazon tiene este poder, sobre el cual monta además una renta extraordinaria, entonces hablamos de un monopolio, plantea el fiscal. Existe un antecedente: en 1911, la Corte Suprema norteamericana planteó que la empresa de David Rockefeller abarcaba todos los aspectos de la comercialización de petróleo, desde la producción, el transporte, la refinación, hasta la venta final de los productos derivados. La Standard Oil fue dividida en 34 empresas independientes.
De 1911 hasta acá pasaron muchas cosas. Entre ellas, que no volvió a existir un fallo similar. ¿Podremos ver algo parecido acá?
Es importante destacar que Google y Facebook también tienen demandas por prácticas monopólicas. La administración Biden viene dando señales de querer innovar en la forma de intervenir con respecto a gobiernos anteriores, particularmente el del empresario Donald Trump.
La demanda de este fiscal también revitaliza algunas discusiones conceptuales sobre qué entender como bienestar para los consumidores. Esto parece un detalle pero puede modificar el futuro de otras demandas similares sobre las empresas grandes, poderosas y monopólicas, no solo dentro de EEUU sino también afuera. Seguiremos hablando de esta demanda durante todo el año”.